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En octubre de 1980, en la Estación Experimental Quilamapu, INIA (Chillán) y con el objeto de estudiar la variación en la acumulación de materia seca (a.m.s.), se efectuó la siembra de un ensayo con tres híbridos de maíz: INIA-8 (semiprecoz), P-3369A (semitardío) y G-4776 (tardío). El diseño fue de parcelas divididas, con 4 repeticiones; las parcelas principales fueron los tres diferentes híbridos y las subparcelas fueron las 10 diferentes fechas de corte para cada híbrido. Los parámetros de producción se ajustaron, por coyarianza, a la densidad media de plantas para cada híbrido. La curva de respuesta fue del tipo: In Y = a + b lnX - cX, en que Y es el parámetro respuesta y X días siembra -cosecha. En los tres híbridos, la a.m.s. de la planta completa continuó más allá del estado de grano lechoso. El aporte de las mazorcas aumentó con la madurez de la planta, hasta llegar a constituir más de 60% de la ms. total de la planta, en el momento de máxima acumulación. El contenido de proteína total en la planta completa tendió a estabilizarse después del estado de grano lechoso. Las fechas óptimas de cosecha de los híbridos estudiados, para obtener la máxima producción en ensilaje, con un contenido de humedad apropiado para minimizar las pérdidas, fueron: híbrido semiprecoz, desde comienzos a mediados de marzo; semitardío, desde fines de marzo a comienzos de abril, y tardío, entre comienzos de abril y fines del mismo mes.