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Durante cinco años se evaluó un sistema de producción de carne, en 4 ha de secano, basado en praderas de festuca, variedad K-31, con trébol subterráneo, variedad Mount Barker, y novillos Hereford. Los novillos ingresaron a las praderas en abril, destetados con 7 a 8 meses de edad y pesos vivos aproximados a 200 kg, para egresar en los meses de diciembre-enero, con peso y estado de gordura adecuados para la venta y beneficio. La pradera se utilizó con pastoreo rotativo de octubre a enero y continuo el resto del afio. Los excedentes primaverales se cosecharon en la forma de ensilaje, que se entregó en el potrero, durante el invierno. La fertilización anual se determino según análisis de suelos, aplicándose el fertilizante fosfatado, en abril,'y nitrogenado, en agosto. La carga animal inicial de 2,5 novillos por hectárea, se aumentó gradualmente una vez al año, en abril. La producción anual promedio de la pradera fue de 8.183 ± 988 kg de m.s./ha y la permanencia de los animales en las praderas de 271 ± 16 dias. La carga animal, desde el primer al quinto año, fue de 2,5; 3; 3,5; 4 y 5 novillos/ha, respectivamente. El peso vivo final y el incremento diario de peso vivo en los primeros cuatro alos promediaron 386 y 0,684 kg/an., respectivamente, lo que permitió su venta. En contraste, el peso vivo alcanzado en el quinto afio de 342 kg/an., con incrementos diarios de 0,531 kg/an., no permitió la venta como animal gordo. Sin embargo, la producción anual de peso vivo aumentó gradualmente con cada aumento de la carga, desde 460 a 765 kg/ha desde el primer al quinto año. El balance de forraje conservado-consumido fue positivo, con disminuciones graduales hasta el tercer año, para ser negativo en los años siguientes. Se concluye que el sistema de producción estudiado alcanzó los mejores indices productivos del ganado y pradera con cargas de 3,5 novillos/ha.