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El trabajo se llevó a cabo en la Estación Experimental Remehue (INIA), durante dos temporadas, con el objeto de evaluar el efecto del corte para ensilaje en diferentes estados fenológicos de una pradera de ballica perenne con trébol blanco sobre la calidad del ensilaje. Los estados fenológicos de la ballica perenne fueron: bota (S), inicio de espigadura (lE), inicio de floración (IF), grano acuoso-lechoso (GAL), y grano harinoso-duro (GHD). El material cosechado fue ensilado en silos de laboratorio sin premarchitar ni aditivo. Los rendimientos de materia seca para S, lE, IF, GAL Y GHD fueron respectivamente para la primera temporada de 4,3; 6,0; 8,9; 9,5; y 7,2 ton/ ha, y para la segunda temporada 2,5; 4,2; 5,6; 6,1 y 6,1 ton/ha. En cuanto a calidad, se observó para ambas temporadas, un aumento del porcentaje de materia seca a medida que avanzaban los estados fenológicos. A la vez, se observó que a medida que avanzaban los estados fenológicos, se produjo una disminución en el contenido de proteína y en la digestibilidad in vitro, variando para el caso de proteína desde 17,1 para S hasta 6,9 en GHD, y en el caso de la digestibilidad in vitro desde 80,8 para S hasta 55,5 para GHD. La calidad de los. ensilajes fue evaluada una vez abiertos éstos, 70 días después de haber sido ensilados. Similares tendencias que en el forraje fresco se observaron para la calidad del material ensilado. A medida que avanza la madurez de la pradera de ballica perenne con trébol blanco, disminuye la calidad. Al respecto, se concluye que la pradera cosechada en el estado S fue la que presentó mejores condiciones al ser ensilada, debido a que fue la de mejor calidad nutritiva y con características fermentativas apropiadas.